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Objetos cotidianos

Objetos en verso

Cada alumno elige un objeto presente en el aula y escribe tres versos sin decir de qué objeto se trata:

  • Su descripción física.
  • Su utilidad.
  • Una metáfora o comparación que se le podría aplicar.

Imágenes de distintos objetos

Cada uno lee lo que ha escrito, mientras lo proyectamos en la pizarra digital y, entre todos, intentamos adivinar de qué objeto se trata. Esa lectura nos ayudará a elegir las parejas con la que vamos a trabajar la segunda parte de esta actividad. 

Entre las dos personas que constituyen los pequeños grupos realizan un nuevo escrito con la consigna de que no pueden añadir ninguna palabra que no hayan escrito alguna de las dos (excepto los conectores imprescindibles) sin embargo, pueden prescindir de las palabras que quieran o repetir las veces que lo deseen alguna de las que haya escrito alguna de las dos integrantes de la pareja.

Ejemplo:

Alumno A: Alumno B: Alumno A + Alumno B
Abro y cierro, salgo y entro
de madera marrón es mi leño
y de metal mi sustento.

Si miras desde mis hojas
verás el patio, el pueblo 
el monte y los cerezos

Abro y cierro, salgo y entro
de madera marrón es mi leño
y de metal mi sustento.

Si miras desde mis hojas
verás el patio, el pueblo 
el monte y los cerezos

Un vídeo sobre los objetos

Este vídeo que supone un respiro en estos tiempos tecnológicos. No tiene grandes efectos especiales ni complejas animaciones, se trata, simplemente (nada más y nada menos), de una buena idea que da pie para un modelo de actividad en clase:

  • Cada alumno elegirá un objeto cotidiano (o inventado) y trabajará en una descripción explicando sus cualidades, usos, aspecto, accesorios... El enfoque puede ser diverso, aunque un poco de ironía no vendrá mal para suscitar el interés durante la proyección
  • Emparejaremos a los alumnos para que puedan filmarse respectivamente, una cámara digital o el teéfono móvil será suficiente.
  • La pizarra o fotocopias del texto a gran tamaño pueden hacer de chivato, así, de paso, imitamos a Obama que, dicen las malas lenguas, utiliza el invento hasta en las intervenciones íntimas.
  • El decorado, sencillo: el objeto en cuestión y una mesa pueden ser suficientes.
  • Cada día vemos y analizamos un corto en la PDI.

La cosa admite multitud de variantes si añadimos diálogos al monólogo, decorados, escenarios, pero entonces ya estaremos en plena producción de una película. Por cierto, el vídeo en cuestión me trae a la memoria otro que se hizo muy famoso en su día y que recupero:

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